A las puercas se las trata con respeto
A las puercas o cerdas se les tiene que tratar con respeto. A las mujeres hay que ponerles un monumento, ya que sin ellas el sexo no tendria sentido. Es un juego de dos personas y ser heterosexual no se entiende sin una buena perra que te la chupe. Follar está en otro nivel y ponerla a cuatro patas y sentirla gemir te lleva a la máxima excitación.