La abuela jubilada tiene la polla atrapada
La abuela jubilada ya ha trabajado bastante y aguantado a su marido. Ahora es su momento y tiene mucho tiempo libre y quiere satisfacer sus apetitos sexuales. Su marido no tiene aguante así que escogerá el que más le llame la atención. Principalmente tirará de los más cercanos y si tiene algún nieto dispuesto será el primero en probar a la abuela marchosa. Disfrutarlo!